René Descartes

"Vivir sin filosofar es, propiamente, tener los ojos cerrados, sin tratar de abrirlos jamás"

martes, 7 de diciembre de 2010

Regalito para las vacaciones!

Les dejo un regalito para armonizar las vacaciones...
EXCELENTE DISCO de una EXCELENTE BANDA



sábado, 4 de diciembre de 2010

¿Tolerancia al flaitismo?


Iba ayer a un "Tambo", junto a unos amigos que gustan también de esas celebraciones indígenas y sincréticas. Cuando subí a la micro, tipo 18:30, el golpe fue inmediato: Un reggaeton fuerte y a las pulsaciones cerebrales se desprendía del celular de un sujeto con corte sopaipilla, vestimenta Daddyyankesca y actitud flaite. La verdad es que creo en la diversidad, creo en la libertad por sobre todo, pero también creo que uno debe ubicarse y respetar el espacio del resto, como si fuese el de si mismo. Por qué lo digo, porque el volumen iba tan fuerte, que claramente molestaba a la gente que iba a su lado, y alrededor.
Avancé por el pasillo, y me coloqué a unos dos metros de él y su compañero (otro especimen vestido como clon a él), y los sonidos disarmónicos y rítmicos en plano se volvían menos tolerantes. Lo que más me daba rabia es el poco tino de estos sujetos que creen pasar por sobre todos y estar encima del resto. Cuando mi nivel de soportar ya estaba llegando a un límite, ocurrió lo inesperado: alguien sorprendió a un sujeto "cartereando" en el bus, y comenzó a gritar en contra de él para -supongo- dejarlo en ridículo y alarmar al resto. Adivinen como iba vestido este supuesto carterista... sip, como un flaite. Mismo corte de pelo, mismo tipo de vestimenta, mismo gorro, etc. La atención por lo tanto se volcó en el supuesto ladrón y en la paliza que le dieron los pasajeros. Yo no me metí, porque creo en los linchamientos, pero tengo mis reparos cuando son simplemente por sospechas.

Bajé, y mientras caminaba por Tarapacá con San Diego, otra escena simbólica: tres flaites pateando un paradero del Transantiago. Lo pateaban porque si, lo rompían. Desde ese momento, comencé a notar que mirara donde mirara, hay un flaite reggeatonero haciendo algo que atenta contra el orden establecido, desde rayar las paredes, carterear, robar, destruir, actuar como matones, hasta perturbar con sus sonidos desde un auto enchulado o desde un celular la belleza momentánea del silencio... son una especie de virus, se han inmiscuido en el ADN de nuestra sociedad a tal punto, que hemos dejado de notar que están ahí, ya los aceptamos, ya nos rendimos o nos dejamos rendir.

Tengo claro que muchos de ustedes, alumnos del CASS, rinden culto y tributo a esa manifestación tribal de los flaites. Muchos de ustedes se visten así, hablan como ellos, se cortan el pelo como ellos, utilizan aretes como ellos... lo que no tengo claro es si acaso tengo que clasificarlos en el mismo segmento de lacra indeseable, o ustedes escapan a la norma. Confío en que sea la segunda opción... aun así, ¿por qué adoptar formas repudiadas y hasta ridículas?

¿Tengo que tolerarlo todo? ¿Tengo que tolerarlos a ellos? ¿Tengo que dejar que un idiota con celular escuche música fuertemente al lado mío, perturbando mi tranquilidad? ¿Tenemos como sociedad que frenar el marco de acción del flaitismo? ¿Merecen todo el espacio que ellos quieren y que antojadizamente toman? ¿Pueden actuar acaso como se les de la gana?
¿Puedo hacerlo yo?
Creo que ahí está la respuesta.

sábado, 27 de noviembre de 2010

Las tribulaciones del joven Werther

Celebrando que estamos leyendo este magistral libro, quiero comentarles algo más de él, en relación al Romanticismo, y a su contexto de producción:

1) Werther, del año 1774 es un prototipo del héroe romántico, aquel que no tiene empacho en "echarse" al mundo encima respecto a sus decisiones. Entra constantemente en conflicto con los miembros de la sociedad civilizada y desde el comienzo notamos que está condenado a autodestruirse por su naturaleza apasionada y obsesiva. Nuestro protagonista sufre de una dualidad simétrica y equivalente de desajuste psicológico, que en alemán se llama por un lado "Weltschmerz" (incomodidad con el mundo) y también de "Ichschmerz" (incomodidad consigo mismo). Werther se atormenta con la imposibilidad de su amor, y esta ambivalencia de incomodidades surge completamente a la luz, especialmente en sus últimas y lastimeras páginas. Comienza a sentir el aislamiento de la sociedad prosaica (prosaico: que adolece de prosa, que es insulso o vulgar) a la que se espera que se adapte. Busca solaz en excursiones nocturnas por montañas y bosques que le ofrecen cierta sensación de sublime liberación. La naturaleza viene en su auxilio cada vez que lo necesita, es en donde siente mayor libertad y desahogo.

RESPECTO AL AUTOR (J.W. Goethe) Y A SU INSPIRACIÓN:

2) Los paralelismos entre Werther y Goethe son evidentes. Ambos celebraban sus cumpleaños el 28 de agosto. Werther en si mismo está inspirado en una situación real que le ocurrió a Goethe. Él tenía de amigo al secretario alemán (un cargo importante de la ciudad donde vivían ambos) Karl Wilhelm Jerusalem. Cierta noche, cuando ambos asistían a un baile, Goethe conoció a la joven Charlotte Buff y a su novio, Johann Christian Kestner, un hombre mayor. Goethe se enamoró instantánea y fulminantemente de Charlotte. Mucho tiempo el escritor alemán cortejó a la señorita Buff, quien al igual que "Carlota" (la protagonista del libro que posteriormente él escribiera) era hija de un oficial y tenía muchos hermanos. La relación entre ambos se transformó en una mezcla de amistad y rechazo. Charlotte fue honesta con Goethe, y le dijo que no había esperanza de una aventura. El 11 de septiembre, Goethe se fue sin despedirse, al igual que Werther, quien se marcha un 10 de septiembre.

Tiempo después, Goethe fue informado que su amigo Jerusalem se había suicidado. ¿La razón? No soportó que el amor que éste sentía por la mujer de otro hombre no fuese correspondido. Jerusalem, también se suicidó con pistolas prestadas.

3) El surgimiento de esta novela dio pie a un fenómeno en Alemania, llamado Werther-Fieber ("Fiebre de Werther"). Los jóvenes en Europa vestían la ropa que Goethe describía usaba Werther.
Se asume además que provocó el primer caso de suicidios en masa de corte mímico (por imitación), supuestamente llevando a la muerte a unos dos mil lectores.

4) Esta "fiebre de Werther" preocupó a las autoridades y a otros autores. Un escritor llamado Nicolai Friedrich, de manera muy barsa quiso escribir un final alternativo de la historia. Torpemente quiso darle un giro animoso y un título mucho peor, llamándolo Die Freuden des jungen Werther (Las alegrías del joven Werther, en contraparte del verdadero título del escrito por Goethe, llamado Las tribulaciones o penurias del joven Werther). En este final alernativo, el personaje Albert notaba las intenciones mortíferas de Werther, y sin que él se de cuenta, llena las pistolas que le presta con sangre de pollo. Con esto no sólo evita el suicidio, sino que en un gesto inexplicable para el desarrollo y la tendencia narrativa de la novela, le entrega gustosamente a Carlota para que se quede con ella... (plop!)
Goethe consideró este final aberrante y despreocupado. Comenzó acá una enemistad literaria con Nicolai, la cual los llevó a escribirse en contra. Goethe escribió un poema titulado Nicolai auf Werthers Grabe, en el cual Nicolai defeca en el sepulcro de Werther, pasando a llevar su memoria.

5) Vean que es la "Elegía de Marienbad". Verán que el mayor romántico de todos, era el mismo Goethe.

Acá, el libro:

Las Tribulaciones del joven Werther

jueves, 25 de noviembre de 2010

DON ALVARO Y LA FUERZA DE SUS ARGUMENTOS


Amigos míos, descarguen y lean.
Me di el tiempo de hacer un análisis un poco más cualitativo que el simple hecho de entregar números.

Desde ya, los felicito por el desempeño.
Fue un muy buen día.

Clasificación de Conectores

Para comenzar a evaluar cuando se utilizan y cuando no...

El listado que utilizaremos.

domingo, 31 de octubre de 2010

Calificaciones SEGUNDO MEDIO


Ahora si que si, las notillas.
Varias cosas: La escala es del 60% tal como debe ser siempre (y no como lo hago muchas veces con ustedes, en que por misericordia la bajo) y el puntaje de corte, es decir, para obtener la nota mínima era de 53 puntos, siendo el máximo 90.

Las siguientes notas no tienen incluidas en su suma, las décimas que han ganado. Si alguno las recuerda, pues sume entonces los puntos a la nota que aquí aparece. Yo supongo que subirán muchos de los rojos.

Felicito a Tamara Toledo y a Sebastián Morgado, ambos las mejores calificaciones en sus respectivos cursos.

Ojo con las evaluaciones sumativas que se vienen!
Y lean HIJO DE LADRÓN.

Saludos


SEGUNDO MEDIO A


SEGUNDO MEDIO B

domingo, 17 de octubre de 2010

¡Nuestro Orgullo!

Qué mejor manera de celebrar el Premio Nobel de literatura del peruano Vargas Llosa, que conmemorando a nuestra primera premio Nobel nacional. Esta mujer es de las más grandes que ha tenido el mundo en el arte de la poesía. ¡ORGULLO NUESTRO!

Acá dejo casi la mitad del libro "DESOLACIÓN", poemario que analizaremos de aquí hasta final de año.

Desolación - Gabriela Mistral.